1º de Mayo de 2020: ¡Quedarse en la casa no es quedarse callados!

Los obreros, los campesinos pobres y todos los que se ganan la vida con su trabajo, consideramos que el 1º de mayo es nuestro día, porque es el día de la lucha por la justicia social plena.

Este día se recuerda con profundo respeto a los mártires de Chicago. Los trabajadores que, por su lucha por la jornada de 8 horas, fueron apresados y condenados a muerte en los Estados Unidos.

Se recuerda a los que entregaron su vida para hacer menos brutal la vida de los asalariados.

Hacemos nuestras las palabras de Samuel Fielden, uno de los mártires, momentos antes de su ejecución.

“Yo amos a mis hermanos los trabajadores como a mí mismo. Yo odio la tiranía, la maldad y la injusticia. El siglo XIX comete el crimen de ahorcar a sus mejores amigos. No tardará en sonar la hora del arrepentimiento. Hoy el sol brilla para la humanidad; pero, puesto que para nosotros no puede iluminar más dichosos días, me considero feliz al morir, sobre todo si mi muerte puede adelantar un solo minuto la llegada del venturoso día en que aquel alumbre mejor para los trabajadores. Yo creo en que llegará un tiempo en que, sobre las ruinas de la corrupción, se levantará la venturosa mañana del mundo emancipado de todas las maldades, de todos los monstruosos anacronismos de nuestra época y de nuestras caducas instituciones…”

Nuestros trabajadores celebraron por primera vez el 1 de mayo en 1913, han pasado más de un siglo desde ese día. Participaron en ese acto tres auténticos próceres de la justicia y la independencia nacional. Carmen Lyra, Joaquín García Monge y Omar Dengo. A ellos es necesario recordarlos junto a los caídos en la luchas obreras y campesinas y convertirlos en insignia de la lucha social de los costarricenses.

Las condiciones actuales de pandemia sanitaria, económica y social han desenmascarado aún más a un sistema capitalista decadente y putrefacto, las maniobras para tratar de recomponerlo o maquillarlo ya son insuficientes, y claramente, no surtirán efecto.

Este 1º de Mayo de 2020, lo conmemoramos bajo estrictas medidas de protección de la vida de la clase trabajadora, la conmemoración de una fecha tan importante es diferente, pero las reivindicaciones son las mismas. La acumulación y del incremento de la riqueza del 1% de la población bajo el capitalismo, mientras el 99% tiene que luchar por sobrevivir, demuestran nuevamente la obscena aberración del sistema.

El ataque sistemático a los derechos fundamentales de la clase trabajadora, los campesinos sin tierra y expropiados, la desocupación en aumento, la pobreza y la miseria, la destrucción del planeta y el saqueo de los recursos naturales, son solo reflejo de una caótica sociedad que lleva al abismo al mundo entero.

En Costa Rica, este 1º de Mayo, en las condiciones actuales, debe ser momento para proteger la vida de todos, pero no debemos callar ante las maniobras de quienes gobiernan para el gran sector empresarial y económico nacional e internacional para enriquecerse mientras privatizan servicios e instituciones, llevan los recursos económicos del Estado a sus cuentas bancarias y empobrecen a nuestro pueblo.

Las medidas implementadas por el gobierno de Carlos Alvarado Quesada junto al Partido Liberación Nacional, Unidad Socialcristiana y los partidos mal llamados cristianos, solo han favorecido y favorecen a ese sector privilegiado de empresarios y banqueros, cargando sobre los hombros del pueblo la crisis económica y los efectos de la pandemia del Covid-19 y eliminando derechos laborales y económicos de la clase trabajadora.

Hoy, cuando conmemoramos un nuevo 1º de Mayo, la clase trabajadora y el pueblo costarricense en general, el reto es el mismo que enfrentan los pueblos que anhelan ser verdaderamente libres, la unidad, la organización, la lucha por esa libertad y justicia social.

El Partido Vanguardia Popular, a lo largo de sus casi 90 años de historia, reafirma su inquebrantable voluntad de trabajo y lucha junto a la clase trabajadora, junto al pueblo, por la reconquista de nuestra patria, arrebatándola de las garras de las aves de rapiña de quienes la saquean y la destruyen.

Unidad de la clase trabajadora, unidad del pueblo, unidad de todas las fuerzas populares es el imperativo fundamental en estos tiempos de pandemia sanitaria, económica y social, no debemos callar ante la injustica, alcemos nuestra voz desde donde estemos, a prepararse para la lucha por la justicia y la libertad.

Partido Vanguardia Popular
1º de Mayo de 2020

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