¿A qué le temen los grandes empresarios?
Por: Martín Rodríguez E.
Los sectores organizados, tanto sindicales, políticos y sociales en general, no tienen duda de quiénes son las más favorecidos con la implementación de las políticas más duras del neoliberalismo, el gran sector empresarial y bancario, tanto nacional como extranjero.
Con el Tratado de Libre Comercio (TLC), con los Acuerdos comerciales con otros países, con los préstamos de grandes bancos internacionales, con el “combo” fiscal, con la OCDE, con el TISA, con la tercerización de servicios públicos o su privatización total, los grandes ganadores son siempre los mismos, ese sector que nos hace ocupar el 9º Lugar en el Mundo entero como país con mayor desigualdad social, el gran sector empresarial.
Ese grupo, que no abarcaría más de 25 familias, se enriquecen a más no poder con las llamadas “crisis” financieras que ellos mismos provocan, al evadir, al eludir, al privatizar empresas y servicios públicos, al ser privilegiados con la reducción parcial y total del pago de impuestos por importaciones y exportaciones amparados en los “Acuerdos Comerciales”, o por la entrega de concesiones de obra pública que no es supervisada y que le termina costando a los costarricenses 10, 20 o 50 veces más y de tan mala calidad que al poco tiempo se les contrata para hacerlo nuevamente. Ejemplos de esto hay muchísimos en calles, platinas y puentes, en la trocha, el Ruta 27, en la carretera a San Carlos o San Ramón, en el cementazo, sólo por poner unos de los cientos de ejemplos a lo largo y ancho del país.
Hoy, los Tribunales de Justicia obligan al Ministerio de Hacienda a visibilizar a los grandes evasores y elusores al Fisco, o sea que por medios ilegales o mediante maniobras no pagan los impuestos que les corresponden. Se dice en corrillos, por ejemplo, que una empresa declaró que tuvo 6 mil millones de colones de ganancias, pero igual cantidad de gastos, por lo tanto pagaba 0% de impuestos, algo, que de ser cierto, es absolutamente increíble.
Hace unos pocos años, diputados afines a sus intereses y empresarios, divulgaron abiertamente los salarios que los empleados públicos (no los de los gerentes o Presidentes Ejecutivos), como una forma de atacar con medias verdades, los montos que ganaban y atacar, por ejemplo los complementos salariales de estos. Eso formó parte de su estrategia para atacar a la clase trabajadora del sector público, pero no denunciaron los ridículos salarios del sector privado a sus trabajadores, no denunciaron a los empresarios que se niegan a pagar el salario mínimo de Ley, los que no pagan la seguridad social, horas extra, vacaciones, etc, o los que con triquiñuelas se declaran en “banca rota” para evitar pagar y posteriormente abrir una nueva empresa bajo otra personería. Hoy se pretende sacar a luz pública en Costa Rica, lo que en muchos países más desarrollados es algo natural y normal, saber quiénes son los evasores y elusores.
El lavado de dinero y la evasión al Hacienda mediante, por ejemplo, los Panama Papers y otros paraísos fiscales, son solo algunas de las artimañas de muchos empresarios utilizan para no pagar a Hacienda, o sea, al Estado, al pueblo costarricense. Debemos conocer quiénes son y qué se hace legalmente contra esto.
El anonimato, el subterfugio, las maniobras legales (leguyadas), la coima o “la propina”, son el común denominador en muchos casos de corrupción en este país.
Sacar a la luz a estos poderosos sectores de la oligarquía corrupta y parasitaria, no es solo una causa necesaria, es patriótica. Los empresarios decentes, los que incluso van a ser consumidos por las transnacionales y otras empresas, deberían velar por sus intereses y los que sean honrados ayudar a sacar a luz a los que no lo son.
El famoso Déficit Fiscal que utilizan de pretexto para imponer por la fuerza el combo fiscal es una realidad, pero una realidad cuyo principal punto detonante es la Evasión Fiscal del gran sector empresarial y que representa el 8,5% del PIB. Si a eso le agregamos que por el TLC con los Estados Unidos el país deja de percibir miles de millones en impuestos y que llegará a 0% de impuestos cuando se cumpla el periodo definido por ese Tratado Comercial, tendremos ante nosotros una crisis fiscal aún mayor.
El pulso hoy, aunque algunos no quieran verlo así, es entre ese sector rico, ese gran sector empresarial y bancario, contra el pueblo costarricense. Nosotros pagamos lo que algunos grandes empresarios le roban al Fisco. Sí, esta pelea es de ricos contra el pueblo, y todo el pueblo, no es que empobrecen a la clase media solamente, no, llevan a la miseria a muchos pobres, aumentando así la brecha entre los que más tienen y los que menos tienen y que nos hace ocupar, hasta hoy, el 9º Puesto en el Mundo entero de los países con mayor crecimiento de la desigualdad social.