«Burbujas» en Costa Rica

Por: Martín Rodríguez E
Bancos y financieras, a manos llenas, dan préstamos para todo, aunque estamos «en crisis», ¿Estallará la burbuja aquí, como en todas partes?
«La deuda es una forma de capital ficticio», dijo Marx, y cuando estalle la «burbuja» el Estado se volverá contra los ciudadanos más vulnerables y se pondrá del lado de los banqueros, eso sucedió en Argentina en el 2000, sucedió en Europa y Estados Unidos…sucederá en Costa Rica, sí, la pregunta es ¿cuándo será?. Ya están montando el escenario, los actores tienen su rol y el final de la obra es predecible.
Nada es casualidad, el alza del precio del dólar, el estancamiento salarial, los recortes de derechos laborales y económicos, los «ajustes» en pensiones, la reducción del pago de impuestos para los grandes empresarios y el aumento de precios para el pueblo trabajador y la privatización de servicios públicos, nada de eso es casualidad.
La clase trabajadora, al ganar menos se tiene que endeudar más para poder pagar viejas deudas y poder darle a su familia una vida digna, estudios, vivienda, salud, alimento y vestido. Eso le sirve a los grandes banqueros, que hacen «clavos de oro» con la «crisis financiera».
¿A dónde nos lleva esto?, a un aumento del descontento social, descontento que se manifestará en las calles y que tendrá como respuesta la «dósis necesaria» de represión policial.
No importa ya si es un gobierno del PLN, del PUSC o el PAC el que endeuda al país y fabrica la crisis, al final de cuentas el color de la bandera no importa, son lo mismo. Quienes realmente tienen el poder, y lo ejercen, son unas pocas familias dueñas de los grandes medios de producción, de los medios comunicación y los entes financieros.
En realidad nunca ha importado si es el bipartidismo o tripartidismo, con la complicidad de otros partidos políticos, llámense cristianos, de centro «izquierda» o centro derecha, los que han llevado a un país con desarrollo eléctrico, de salud, educación y comunicaciones a ser un país que no tendrá nada y lo deberá todo.
¿Podemos dar marcha atrás a ese terrible futuro cercano?, por lo pronto sería dejar de entregar el voto a los verdugos, segundo desarrollar una verdadera unidad nacional, sin el concurso de los verdugos, y finalmente construir una nueva alternativa político social desde abajo, desde el pueblo. Cada quien desde su trinchera, aportando a la construcción de esa alternativa, pero con la convicción en la necesaria unión para enfrentar este modelo neoliberal, derrotarlo y construir el socialismo. Luego será tarde.
Martín Rodríguez E.