Nefasta herencia del primer año de gobierno del régimen Piza-Alvarado y quinto del PAC
Por: Martín Rodríguez Espinoza
Periódico Libertad
Hacer un balance del primer año de gobierno Piza-Alvarado, que en realidad es el incestuoso acuerdo entre el PAC-PLN-PUSC para impulsar una agenda neoliberal radical contra el pueblo costarricense, nos deja muchas cosas en evidencia.
La llamada “crisis” fiscal del país, que no ha sido obra de la casualidad, es provocada por la implementación de políticas neoliberales más duras a partir de los años 80´s con los nefastos gobiernos del PLN y el PUSC.
A la par de esto, el sistemático saqueo de las arcas del Estado, los chorizos, la corrupción descarada desde las altas esferas de los gobiernos de turno del PLN, PUSC y ahora su nueva casa, el PAC, pero que son y representan lo mismo y a los mismos, una oligarquía, que es el sector financiero de los grandes millonarios de Costa Rica, una oligarquía que además es corrupta y parasitaria.
La privatización de instituciones y servicios públicos, el deterioro sistemático de la infraestructura institucional de servicios esenciales para el pueblo costarricense como la educación pública, la telefonía y la electricidad, la salud pública, el agua potable, la agricultura, la vivienda y, por supuesto, las fuentes de empleo.
La Evasión Fiscal de las más grandes empresas nacionales y transnacionales supera el 8%, la elusión fiscal que son los “huecos” legales que utilizan para no pagar impuestos, el multimillonario contrabando aduanal, el robo billonario de las arcas del Estado por medio de chorizos como el de Caja-Fischel por 32 millones de dólares, el caso Alcatel por 60 millones de dólares, el caso de “la trocha” por 45 millones de dólares, El caso Soresco por 45 millones de dólares, el caso increíble de OAS para la construcción de una carretera a San Ramón por la que no pusieron un cinco y les regalaron 32 millones de dólares, el caso Yanber de la familia Yankelewitz por 37 millones de dólares, el Cemento chino por 30 millones de dólares, la planta Hidrotárcoles por 117 millones de dólares, el caso Coopelesca por 35 millones de dólares, los casos de La Nación y de Televisora de Costa Rica, Teletica, que terminaron “arreglando” un acuerdo en donde les “perdonaron” miles de millones de colones a cambio de pagar “algo”, son solo algunos de los cientos de casos de corrupción impresionantes fomentados desde las más altas esferas político empresariales.
Y como “premio” final, como dicen, “la cereza en el pastel” les brindan una “amnistía” tributaria a los grandes ricos del país para que paguen “lo que puedan”, condonándoles entre el 60% y el 80% de lo adeudado.
Como corolario de esta trágica realidad que vivimos, ahora los grandes magnates, esa oligarquía corrupta y parasitaria que desangra el país, llaman a que se apruebe lo más rápido posible el préstamo internacional, llamado Eurobonos, por 6 mil millones de dólares. Están desesperados por esa “piñata” multimillonaria, por repartírsela y que sea el pueblo, como siempre el que termine pagando la deuda del país.
Mientras esto sucede, el pueblo paga con impuestos, aumentos de tarifas, congelamiento salarial, eliminación de complementos salariales, lo que provoca que el poder adquisitivo del pueblo se reduzca y que se produzca lo que hemos estado viendo, menos consumo que lleva a la quiebra a miles de pequeños empresarios, el cierre de 58 mil microempresas sólo en el 2018. Además que aumente el desempleo, el más alto de la historia de Costa Rica, entre el 12 y 14%, casi 300 mil personas sin empleo, también que aumente la pobreza, también a niveles históricos entre el 22% y el 29% dependiendo de la zona geográfica del país.
A todo esto agréguele que el llamado trabajo informal, el de supervivencia, que llega a casi el 47%, más de 1 millón de personas, y el sub empleo alcance el 8,6%, o tal vez más, lo que significa alrededor de 200 o 250 mil personas subempleadas.
Todos estos datos provocan que los niños y los jóvenes abandonen las aulas para salir a la calle a ganarse “algo”, que no coticen a la seguridad social y se deterioren los servicios de salud pública, que el pueblo no pueda consumir y que los negocios cierren por esa falta de consumo y haya más desempleo.
El nivel óptimo de crecimiento económico de este país, para estar bien, debe ser de entre el 5% y el 6%, el aceptable para esta más o menos bien debe ser al menos del 4%, pero en la actualidad es del 1,7% o 1,8%, lo que apenas da para sobrellevar la situación.
Entre los sectores sociales más golpeados por toda esta situación de maquiavélica trama de la mafia político-empresarial que dirige las riendas del país, está el sector agropecuario, los agricultores nacionales, los productores de muchos de los alimentos que consumen nuestras familias. Desde aquel eslogan electoral de “volvamos a la tierra” del gobierno de Luis Alberto Monge del PLN, nosotros entendimos que se trataba de “volver” a la tierra, pero muertos de hambre, pues bueno desde esos años al sector agrícola nacional lo sentenciaron a muerte, destrozaron el CNP, el MAG, la producción de semillas y cancelaron la asistencia técnica, mecánica y financiera a los agricultores. Finalmente con los TLC, terminaron de colocar los clavos en el ataúd, el TLC con Estados Unidos protege a los productores estadounidenses y prohíbe que el gobierno nacional haga lo mismo con los productores nacionales y deja abierta la puerta para que los productos que vienen de afuera tengan libertad e igualdad de competencia con los nacionales. Hoy la agricultura nacional está en quiebra y la seguridad alimentaria del pueblo destrozada.
Pues bien, a un año del régimen Piza-Alvarado y cinco del régimen PAC-PUSC-PLN y los llamados “partidos cristianos”, el país se encuentra a punto de llegar a niveles de necesitar ayuda humanitaria internacional .
La lucha de clases en su máxima expresión, los ricos más ricos y los pobres más pobres, luchando unos por tener más y más y otros por tener para comer día a día.
Peor panorama no podemos tener, pero es también una oportunidad para trabajar por la conformación de la Unidad Popular y Patriótica necesaria para enfrentar a esta mafia político-empresarial. Que sea esta, para cambiar las cosas de verdad, no para mantener el statu quo y que nos sigan robando los mismos de siempre.
Nuestro Partido, Vanguardia Popular, cree en la vía del socialismo, darle el poder al pueblo y construir un nuevo país de justicia e igualdad, para eso debemos desterrar la dictadura de esa mafia político-empresarial que ostenta el poder desde 1948 y hasta la fecha.
Muchas de las cosas que requiere nuestro pueblo son tierra para el que la trabaja, vivienda digna, salud y educación pública fortalecidas, salarios y condiciones de trabajo dignos, desarrollo de fuentes de empleo, desarrollo de infraestructura, carreteras, puentes, escuelas; respeto a los territorios indígenas y desarrollo de infraestructura en vivienda, salud, educación y financiera para producir para este sector de nuestra población, son solo algunas de las tareas que hay que enfrentar y que el sistema actual de capitalismo salvaje se empeña por destruir.