¡Feliz cumpleaños Carlos Marx, tenías razón!

Por: Martín Rodríguez E.

Así titula el profesor de filosofía Jason Barker un artículo suyo en el New York Times, me gustó el título y parte de su escrito, sin embargo no es más que una referencia para la celebración mundial del 200 aniversario del nacimiento de Carlos Marx en este año de 2018.

Indica el profesor Barker que, El 5 de mayo de 1818, en la ciudad de Trier, en el sur de Alemania, en la pintoresca región vinícola del valle del Mosela, nació Karl Marx. En ese momento, Trier tenía una décima parte del tamaño actual, con una población de alrededor de 12,000. Según uno de los biógrafos más recientes de Marx, Jürgen Neffe, Trier es una de esas ciudades donde «aunque todos no conocen a todos, muchos saben mucho sobre muchos».

Tales limitaciones provinciales no podían competir con el ilimitado entusiasmo intelectual de Marx. Fueron raros los pensadores radicales de las principales capitales europeas de su tiempo que no cumplieron o no lograron romper con los teóricos, incluidos sus contemporáneos alemanes Wilhelm Weitling y Bruno Bauer; el «socialista burgués» francés Pierre-Joseph Proudhon, como Marx y Friedrich Engels lo calificarían en su «Manifiesto Comunista»; y el anarquista ruso Mikhail Bakunin.

Hasta aquí la transcripción de parte del artículo del profesor Barker.

Este 5 de mayo de 2018, en el marco de la conmemoración del 1º de Mayo, Día Internacional de la Clase Trabajadora, todos los pueblos del mundo celebran el legado de Carlos Marx.

La publicación del primer volumen de la trilogía de El capital, de Carlos Marx, ha cumplido ya 151 años. Es el único que escribió completo, porque los otros dos los elaboró Friedrich Engels a partir de las notas que había dejado su amigo ya fallecido.

Tiempo después de la publicación de este volumen se autorizó la traducción al ruso entre grandes reservas porque, decían, allí nadie se lo iba a leer, sin embargo al final contribuyó a destruir el poder de los zares e impulsó la revolución obrera en todo el mundo.

Alguien escribió que “son muchos los libros que explican una época, pero son muchos menos los que la definen.”, ese debe ser uno de los aspectos más sorprendentes de El capital, su capacidad para volver a ser tan vigente en la actualidad, al aflorar las constantes crisis económica económicas del capitalismo.

Estas crisis económicas en Costa Rica y todo el mundo, dejan al desnudo las grandes contradicciones del capitalismo y la lucha de clases entre ricos y pobres.

El hecho de que Carlos Marx abriera los ojos de la explotación a millones de obreros, campesinos, trabajadores y pueblos en general, y que estos descubrieran el secreto de la forma en que se da esa explotación, fue, es y será, el legado imperecedero de Marx que aún hoy libera mentes y rompe las cadenas que atan a la clase trabajadora.

Marx, Engels y posteriormente Vladimir Illich Úlianov (Lenin), en el conjunto de ideas, lograron descifrar y proponer una nueva sociedad, una nueva forma de vivir, el Socialismo, como camino hacia la liberación definitiva del ser humano, el Comunismo.

Con estas palabras concluye el Manifiesto Comunista de Marx y Engels, Los proletarios no pueden perder más que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo por ganar. ¡Proletarios de todos los países, Uníos!”

Este día 1º y el 5 de Mayo, que la clase trabajadora y los pueblos del mundo fortalezcamos nuestras convicciones de lucha por la unidad y la liberación de nuestro pueblo de las garras de la oligarquía corrupta que nos desgobierna.

Escribió Carlos Marx lo siguiente:

«En la misma proporción en que se desarrolla la burguesía, es decir, el capital, desarróllase también el proletariado, esa clase obrera moderna que sólo puede vivir encontrando trabajo y que sólo encuentra trabajo en la medida en que éste alimenta a incremento el capital. El obrero, obligado a venderse a trozos, es una mercancía como otra cualquiera, sujeta, por tanto, a todos los cambios y modalidades de la concurrencia, a todas las fluctuaciones del mercado»

«La existencia y el predominio de la clase burguesa tienen por condición esencial la concentración de la riqueza en manos de unos cuantos individuos, la formación e incremento constante del capital; y éste, a su vez, no puede existir sin el trabajo asalariado. El trabajo asalariado presupone, inevitablemente, la concurrencia de los obreros entre sí. Los progresos de la industria, que tienen por cauce automático y espontáneo a la burguesía, imponen, en vez del aislamiento de los obreros por la concurrencia, su unión revolucionaria por la organización. Y así, al desarrollarse la gran industria, la burguesía ve tambalearse bajo sus pies las bases sobre las que produce y se apropia de lo producido. Y a la par que avanza, se cava su fosa y cría a sus propios enterradores. Su muerte y el triunfo del proletariado sin igualmente inevitables».

A expensas de mejor criterio, las principales ideas que expone la explosiva trilogía de El Capital de Marx, podrían resumirse en:

  1. La economía no debe divorciarse de la moral pública y la política. No se puede entender la economía en términos de producción y olvidarse de la explotación de los trabajadores, de la brutal concentración de la riqueza o de unos derechos de propiedad que son injustos.
  2. Los derechos de propiedad son el resultado de un proceso histórico violento y abusivo. Además, protegen a sus titulares para que no tengan que compartir la plusvalía, esto es, la diferencia entre el precio al que se vende el producto y lo que pagan al obrero que lo fabricó.
  3. Mientras eso ocurre, los trabajadores viven en la pobreza, reciben salarios de subsistencia y se enfrentan a un desempleo rampante. Aquí tenemos una de las fuentes principales de la lucha de clases entre proletarios y propietarios.
  4. Tanto si son conscientes como si no, existe una lucha de clases entre trabajadores y burguesía. Esa lucha refleja las contradicciones del capitalismo, que hacen de él algo insostenible y que convierten la revolución en urgente y necesaria. Las crisis económicas muestran esas contradicciones y propician la revolución.
  5. Si la economía es una ciencia, existen unas leyes universales que predicen su evolución. El capital recoge esas leyes, y por eso puede predecir, a grandes rasgos, el futuro del capitalismo, su caída y la toma del poder del proletariado.
  6. Uno de los motivos de la muerte del capitalismo es que este combina la superproducción de sus fábricas y la existencia de una población que no tiene recursos para comprar lo que se produce.
  7. Las fábricas de la clase capitalista están condenadas a la quiebra debido a la mecanización masiva. Como el beneficio solo es posible a partir de los salarios de los trabajadores explotados y las máquinas no pueden ser explotadas, a las empresas y al sistema únicamente les espera la bancarrota.

Feliz cumpleaños Carlos Marx, sigues teniendo la razón.

¡Proletarios de todos los países, Uníos!

Facebook Comments

Deja una respuesta