Los pueblos contruyen paz, el capitalismo fabrica guerras
Por: Edgar Gutiérrez
Hoy, desde las primeras horas de la mañana he estado sentado frente al televisor, esperando ver la transmisión, de la toma de posesión de la Asamblea Constituyente en Venezuela.
Debo confesar que afloraron lágrimas a mis ojos, cuando escuché el discurso de esa valiente mujer, Delcy Rodríguez, sin lugar a dudas una hija de Bolívar, una revolucionaria latinoamericana y mundial.
La derecha venezolana no le perdona al presidente Maduro el haber convocado a una Constituyente, porque eso significó empoderar al pueblo y tomar las riendas del futuro de una patria que merece vivir en paz.
Sólo los pueblos son constructores de paz. Por el contrario los intereses mezquinos del capitalismo salvaje son fabricantes de guerras, porque las convierte en un negocio más, que les permite colonizar pueblos y apoderarse de los recursos naturales de estos.
En el caso particular de Venezuela, el interés de la derecha nacional e internacional, es robarle al pueblo venezolano sus recursos naturales.
Si Venezuela, no fuera una potencia petrolera, ninguna potencia imperialista estuviera invirtiendo recursos para derrocar a un gobierno constitucionalmente electo, como es de venezolano.
Es tarea de nosotros los revolucionarios de América, estar dispuesto a dar lo mejor, para defender el proceso venezolano en todos los campos.
«Mejor morir luchando por la libertad que ser un prisionero todos los días de tu vida», Bob Marley
Paso Canoas, 04 agosto 2017.